La predicción de la siguiente ola destructiva
Investigadores utilizan tabletas robustas ALGIZ para recopilar datos submarinos
Desafío
Recopilar y procesar datos en tiempo real durante una jornada completa sobre el terreno.
Solución
Software específico con tabletas robustas Algiz 7 y Algiz 10X.
Resultado
Recopilación precisa de datos en condiciones adversas, procesamiento y registro de datos en tiempo real durante una jornada completa y sin interrupciones.
Guy Meadows y sus colegas del Great Lakes Research Center de la Universidad Tecnológica de Michigan utilizan las tabletas robustas Algiz 7 y Algiz 10X para recoger datos submarinos a lo largo de la costa del lago Michigan, donde, el año pasado, murieron ahogadas 50 personas en accidentes producidos cerca de la orilla.
Persiguiendo tormentas
El equipo de Meadows, que incluye a un grupo de investigadores de sensores remotos por satélite procedentes del Michigan Tech Research Institute (MTRI), se dirige directamente a las tormentas que han golpeado las orillas del lago Michigan para poder hacer un seguimiento de las corrientes más peligrosas, antes, durante y después de que se desarrollen.
“Una vez que llegamos a la playa donde se espera la tormenta, hacemos mediciones de las formas de la parte submarina de la playa y su condición antes de la tormenta. Con la ayuda de flotadores a la deriva y otras herramientas, cartografiamos la posición y fuerza de las corrientes más peligrosas durante el oleaje. Una vez ha pasado la tormenta, nos metemos en el agua para recoger información sobre los cambios ocasionados en la playa”, explicó Meadows.
El equipo utiliza una embarcación con la cubierta abierta que incorpora un sónar de exploración vertical y un sistema GPS. Cada segundo, con la ayuda de su tableta robusta Handheld Algiz 7 recopilan datos de latitud y longitud, profundidad del caudal y temperatura, además de otras métricas.
“Salimos en una embarcación con la cubierta abierta, con olas de 3 a 4 pies y, a menudo llueve, por lo que es de agradecer tener un dispositivo impermeable como el Algiz 7 que se puede colocar fácilmente en el fondo del barco”, afirmó Meadows.
En la actualidad, la Algiz 7, recientemente actualizada, incorpora la tecnología de un procesador Intel Atom de 1,6 GHz con 128 GB SSD y 4 GB de DDR3 RAM en un paquete de 2,42 libras. La doble batería intercambiable sin desconexión de 2600 mAh permite a Meadows y a su equipo recoger datos durante todo el día, con la posibilidad de cambiar baterías sin necesidad de apagar el dispositivo.
La Algiz 7 que utiliza el equipo de Meadows incorpora un programa de software denominado Undersee Explorer que cartografía el fondo marino en tiempo real. “A medida que los datos fluyen en la Algiz 7 se van convirtiendo en un mapa tipo GIS, que podemos observar mientras vamos trabajando. ¡Es muy profesional!”, afirmó Meadows.
En realidad, Meadows lleva recogiendo datos sobre corrientes de resaca desde el 2002. En el pasado, su equipo había confiado siempre en los portátiles estándar para recoger todos los datos, una costumbre que no recomendaría en la actualidad. “Los portátiles solían sufrir muchos golpes”, afirmó. “La tapa se suele abrir y rebota cuando el oleaje choca contra el barco. Son incómodos y frágiles.”
Comparativamente, afirmó Meadows, “disponer de un ordenador pequeño como el Algiz 7 que es robusto y es fácil de utilizar resulta una ventaja real”. Debido a que la amplia pantalla táctil de 7 pulgadas incorpora tecnología MaxView™, que proporciona un brillo espectacular en condiciones de exterior, afirmó: “Podemos observar los datos cartografiados con una claridad absoluta, incluso en los días más soleados”.
Un día más en la playa
Otra parte importante del proyecto de investigación, que está patrocinado por el Departamento de Calidad Ambiental de Michigan, implica confirmar la ubicación de corrientes de resaca identificadas por satélites comerciales en algunas de las playas más populares del lago Michigan.
Los investigadores utilizan embarcaciones dirigidas por control remoto en las aguas menos profundas y barcos más grandes para el resto y cartografían las zonas de playa antes de que se desarrollen las corrientes de resaca. Habiendo confirmado la precisión de los datos del satélite, el equipo está cada vez más cerca de poder predecir donde se desarrollarán las corrientes más peligrosas cerca de la orilla.
Los datos del satélite se cargan en la Algiz7 con la ayuda del software Undersee Explorer, que permite al equipo navegar hasta el lugar adecuado. Una vez allí, registran la profundidad y crean un mapa actualizado basado en las lecturas de profundidad que reciben en tiempo real.
La capacidad del equipo para registrar durante un día entero todos los datos sin interrupciones es clave para que el proyecto sea un éxito — la Algiz 7 hace que esa tarea sea posible. En el pasado, los ordenadores portátiles tradicionales solo eran capaces de almacenar y procesar una cantidad ilimitada de datos que, de vuelta en el laboratorio, había que introducir en el ordenador para procesarlos y poder verlos con claridad.
“La Algiz 7 es capaz de cartografiar corrientes de resaca en tiempo real, con lo podemos saber en ese mismo momento si hemos encontrado la corriente que estábamos buscando. Ahora ya no es necesario recorrer 500 millas para regresar al laboratorio y comprobar si hemos recogido los datos correctos”, afirmó Nate Jessee, investigador adjunto en el MTRI.
Jessee y el resto de su equipo utilizaron una Algiz 10X, que incorpora una pantalla de 10 pulgadas, para realizar las pruebas más recientes en una playa de la costa norte del lago Michigan.
“Sinceramente, nos gustan los dos dispositivos”, afirmó Jessee. “Para nosotros, resulta muy tranquilizador saber que el dispositivo puede soportar golpes y el agua y seguir recopilando datos sin interrupciones.”
Prediciendo el futuro
Meadows y su equipo han descubierto que las olas de tamaño medio y las corrientes de resaca que se asocian a las mismas son las más peligrosas. Fueron los primeros en descubrir que las corrientes de resaca migran a lo largo del día; esto significa que una playa puede ser segura por la mañana para luego pasar a ser peligrosa durante la tarde.
En la última parte del proyecto de investigación del MTRI, toda la información recopilada a partir de los dos componentes sobre el terreno será utilizada para implementar mejoras en la seguridad de los parques a lo largo del lago Michigan. En colaboración con el Michigan DEQ, Meadows y su equipo desarrollarán procedimientos para poder advertir de forma más eficaz de la presencia de condiciones peligrosas en el agua.
“A través de las imágenes tomadas por satélite, hemos descubierto que en ciertas playas se producen corrientes de resaca en el mismo lugar, por lo que, tal vez, es aconsejable trasladar esas playas”, dijo Meadows. “Hay zonas que son muy dinámicas, en las que alternan días con resaca y otros sin, por lo que es necesario transmitir de una forma más eficaz, dicha información a las personas que están en la playa.”
En el futuro, Meadows contempla un sistema de radar automatizado, montado sobre unos postes, para poder vigilar todas las playas y predecir el desarrollo de corrientes peligrosas e instalar un sistema de alarma, o incluso el envío de mensajes de texto, para que la gente pueda salir y permanecer fuera del agua hasta que las condiciones sean más seguras.
Meadows confía en los investigadores y en la posibilidad de que, en un futuro no muy lejano, el peligro de una posible corriente peligrosa cerca de la orilla pueda predecirse antes y de forma más eficaz para ser comunicado de forma más eficaz y reducir, así, el número de accidentes mortales en las orillas del lago Michigan.